Tras 12 años en prisión, Palmer (Justin Timberlake), un exjugador de fútbol, vuelve a casa para rehacer su vida. Mientras se adapta a su nueva realidad, entabla una amistad con un niño abandonado, pero su pasado le persigue. ‘Palmer’ es una película de Fisher Stevens que nos replantea en una sociedad que cada vez es menos sincera, donde las personas decentes encuentran la fuerza para sobrevivir en circunstancias difíciles.
‘Palmer’
Eddie Palmer es una antigua estrella del fútbol universitario, pero que ve su futuro truncado por una lesión, haciendo que regrese a su casa. Intentando hacerse una vida, acaba envuelto en un robo y es acusado de asesinato, por lo que acaba 10 años en la cárcel. Cuando sale, vuelve a casa de su abuela (June Squibb), con la intención de poner su vida en buen camino, pero esto le significa el volver a enfrentarse a viejos conflictos de su pasado. En la casa de al lado vive una mujer adicta con su hijo Sam (Ryder Allen) de 8 años, a quien le gusta jugar con muñecas y vestirse de niña. Todo da un giro inesperado cuando se encuentra a cargo del niño porque la madre lo abandona y comienza una relación con Maggie Hayes (Alisha Wainwright), una profesora que acompaña a Sam en su proceso.
Sencillez
Uno de los aspectos a destacar en ‘Palmer’ en la sencillez de la narrativa visual. Desde el comienzo, el director Stevens (Premio de la Academia 2010 a la Mejor Película Documental por The Cove y el Premio Independent Spirit 2008 a la Mejor Película Documental por Crazy Love) relata que la historia debe ser directa y clara, con una fotografía oscura y con pocas coloraciones que resalta la realidad de Palmer, de su vida gris y el deseo de salir adelante.
En si, la trama puede ser predecible, pero la construcción de los personajes permiten que cada uno sobresalga en el rol. Cada uno de ellos son familiares pero están llenos de vida, sobretodo cuando el vínculo paterno que se forma entre el ex convicto y un niño vulnerable de siete años, que todavía no comprende su contrexto, permiten potenciar un retrato dulcemente creíble de dos marginados que dan un sentido de pertenencia el uno al otro.
Protagonistas
Otro de los elementos que cautivan de ‘Palmer’ es la actuación de Timberlake, que se pasa la mayor parte de la película frunciendo el ceño ante las sombras de un pasado invisible, con la oportunidad de tener una segunda oportunidad en el lugar que lo vio crecer. Pero la cinta no se detiene en ello, sino que pasa a otro lugar. El director Fisher Stevens lo manifiesta, pero no enfatiza en ello.
Mientras que Sam (Ryder Allen), de ocho años, tiene un fuerte control sobre su personaje: un inteligente niño mantiene las cosas ancladas en su propia precocidad que equilibra mucho su personaje, para darle ese toque dramático que aumenta la perceptibilidad del personaje.
Conclusiones
Finalmente, podemos decir en ‘Palmer’ lo mejor que tiene son las conexiones sinceras de sus personajes que transmiten la autenticidad de la cinta. Y es que la sinceridad es la excusa para que cada uno de los protagonistas encaje a la perfección en el lugar. Además, las pequeñas cosas contribuyen en gran medida a que la cinta tenga la fuerza sensorial que se necesite, y sobretodo, para captar, porque los dos protagonistas se complementan ante la soledad que los rodea.
Ficha técnicaTítulo original: Palmer Año: 2021 Duración: 110 minutos País: Estados Unidos Dirección: Fisher Stevens Guion: Cheryl Guerriero Música: Tamar-Kali Brown Fotografía: Tobias A. Schliessler Reparto: Justin Timberlake, Juno Temple, Alisha Wainwright, June Squibb, Dean Winters, Wynn Everett, Jesse C. Boyd, Ryder Allen Productora: Sidney Kimmel Entertainment, Rhea Films (Distribuidora: Apple TV+) Género: Drama | Familia. |
‘Palmer’ las conexiones sinceras de sus personajes